Intervención en San Potito



Intervención realizada este verano en San Potito, un pueblo de Nápoles, Italia, perteneciente a la red urbana de slowcities. La obra se creó dentro del marco del Festival de cine “Cinemadamare” en el que ocho artistas canarios de La Regenta fueron invitados a realizar intervenciones de arte público en el pueblo.

Su autora, M. Esther Azpeitia, nos cuenta acerca del proceso que vivió alrededor de la creación de la obra:

Cuando llegamos al pueblo nos hablaron de la importancia del agua para ellos, que la trama urbana quedaba determinada por el recorrido del agua, y en puntos concretos de ese recorrido establecieron fuentes y lavaderos. Así que la idea del mural es hacer un "mapa del agua" de San Potito, en el que tomé sólo el espacio público y los puntos en donde el agua sale de la tierra para dar de beber o para que los habitantes del pueblo laven sus ropas, fuentes y lavaderos.

Sobre la localización de esta pared, está en la Vía Crocce, que es una vía que bordea el pueblo (por debajo) hacia el sur y de este a oeste, en un punto en el que se produce un cruce de calles y el acceso al pueblo desde el sur. Me pareció que estaría bien remarcar esta entrada al pueblo, en un chaflán que recorta la esquina del cruce, con un mapa del agua y justo enmarcando la primera fuente que te encuentras, que además de ser muy guapa estaba casi invisible, debido al color de la pared de fondo que diluía la presencia de la fontana y a que aparcaban coches delante, contenedores,...

Otro elemento del mural son las tramas que se ven superpuestas junto a las vías de espacio público. Resulta que el muro estaba cubierto por un manto vegetal de raices que salían de la finca de arriba y que habían crecido hasta extenderse por todo el chaflán del cruce y hacia las paredes laterales, me parecía que además de ser bonito, era parte de la pared, ¿cuántos años habrá tardado en tejerse? yo no podía llegar y quitarlo, por más que a los del pueblo no les gustase, si quitaba las raíces en el chaflán se iba a ver algo discontinuo en las paredes anexas, así que lo incluí como parte del mural, que una vez colocado sobre la pared continuaría con las líneas vegetales existentes.

Para terminar necesitaba una textura que le diera fondo a todos los elementos y me pareció la más adecuada el agua del mar. Yo soy isleña, de las Islas Canarias, y fotógrafa así que inevitablemente tengo muchas imágenes del mar, llevaba conmigo para allá unas fotografías que hice aquí en el puerto, donde el agua juega con el color de los barcos, la luz y la grasa y crea imágenes guapísimas. Así que ya está, los rojos son reflejo del casco de un barco y los azules reflejo del cielo. El espejo es el mar y así se cierra el ciclo del agua que queda representado en este mural.

Ah! me olvidaba decirte que está hecho todo a partir de fotografías y al final el montaje se imprimió en lona y se montó sobre la pared, recortando la fuente para enmarcarla.

2 comentarios:

ESTHER AZPEITIA dijo...

hola, gracias por la publicación.
Aprovecho para invitarles a mi blog. http://lapieldelaciudad.blogspot.com
saludos!

CESAR R. KLINGER dijo...

excelente publicación y aprovecho para hacerle la bienvenida desde

http://elmundosegunklinger.blogspot.com/